EL POETA ZULIANO IDELFONSO VÁSQUEZ

El Zuliano Rajao



Nace en Maracaibo, Zulia, el 27 de mayo 1840, el poeta, médico, escritor, periodista y docente Idelfonso Vásquez, quien forma la primera triada gloriosa de poetas zulianos junto a Rafael María Baralt y José Ramón Yepes.

Desde joven incursiona en la literatura regional y estudia en el Colegio Nacional de Maracaibo, formando parte de la Sociedad Eco de la Juventud en su segunda etapa. Tiempo después, fue presidente de la Sociedad Alumnos de Minerva, redactor de los periódicos La Esperanza, El Correo del Zulia y El Rayo Azul.

Después de graduado de médico ingresa al Hospital Chiquinquirá de Maracaibo, el cual era dirigido por su gran amigo Manuel Dagnino. Dicta clases en el Colegio Nacional de Maracaibo y fue colaborador de los diarios: La Antorcha, El Periódico, El Cocuyo, La Mariposa, El Sabatino, El Sociologista, Americanas, El Tipógrafo, La Bandera Cubana, Luz y Sombra y El Benefactor.

Idelfonso Vásquez intentó construir en un poema de largo aliento que llevase desde la fundación de Maracaibo hasta su desarrollo posterior, planificándolo en cinco cantos, de los cuales solo llegó a escribir el primero. En su honor una parroquia del municipio Maracaibo lleva su nombre.

A continuación uno de sus poemas:

EL RAYO DE LUZ

Rápido mensajero de esos mundos,
que recaman y pueblan el vacío,
halla estrechos los ámbitos rotundos
y cabe en una gota de rocío.

Es en la luna broche de diamante
por Dios prendido en los nocturnos velos;
en la centella, sierpe rutilante;
y en el Iris corona de los cielos.

En la estrella polar, fulgor que salva;
caleidoscopio en el cristal del alba;
feliz testigo en la nupcial alcoba.

Flecha incendiaria que los nervios crispan
si se dispara de amorosa tea;
lampo en el oro; en el acero chispa;
llama en el sol, y en el cerebro idea.


Por: Agustín Arteaga

APOSTADORES MARACUCHOS


Dos apostadores enfermizos están mirando a la vieja del frente que tiene las piernas abiertas y dicen: - La pantaleta de la señora es negra; el otro apostador brinca y dice: - NO! es marrón... Mandan a un carajito a verificar de qué color es la pantaleta y al regresar les dice: - Se pelaron los dos, ni es negra ni es marrón… son moscas.