URGE LA DEFENSA DE MARACAIBO




En época de la colonia, siempre la gran preocupación de las autoridades españolas era por la defensa de sus posesiones en América, más aún, cuando piratas y corsarios mantenían azotadas sus costas y saqueaban constantemente los pueblos ribereños.

Por este motivo, se dicta una Real Cédula, fechada el 3 de junio de 1668, a través de la cual se ordena a Diego Villalba y Toledo, que informe sobre la conveniencia de fortificar el Puerto de Maracaibo, y si la Armada de Barlovento podía ocuparse de su vigilancia y protección.

El informe aprueba la fortificación de La Barra de Maracaibo, pero no contando con la Armada de Barlovento, que no podía permanecer en un sólo lugar, ya que debía proteger otros puertos en las costas del mar Caribe, y Maracaibo exigía una mayor protección. Muchos años después, es cuando se toman las precauciones necesarias para la defensa de la ciudad.


Por: Agustín Arteaga

APOSTADORES MARACUCHOS


Dos apostadores enfermizos están mirando a la vieja del frente que tiene las piernas abiertas y dicen: - La pantaleta de la señora es negra; el otro apostador brinca y dice: - NO! es marrón... Mandan a un carajito a verificar de qué color es la pantaleta y al regresar les dice: - Se pelaron los dos, ni es negra ni es marrón… son moscas.