LENGUAJE ZULIANO, ¿CASTELLANO MARACUCHO?

Emmanuel Fuenmayor / El Zuliano Rajao



¿Y cómo no mencionar a nuestro lenguaje zuliano, también llamado maracucho, que ha sido una grandiosa variedad del idioma español?, a diferencia de los dialectos de la capital de Venezuela o la región andina, el maracucho es típicamente voseante.

El "vos" se repite con orgullo en toda la tierra del sol amada, desde la persona más humilde hasta el más instruido. Las frases, refranes y expresiones de los zulianos se han creado desde la base de la sensibilidad. En el Zulia muchas cosas han cambiado, pero no hay forma de que se renuncie a su lenguaje, es parte de su personalidad.

Ni en la última actualización de la Real Academia Española se hallarían los mejores adjetivos que utilizamos los zulianos a diario: arbolario, farfullo, lambucio, tribilinero, persuadido; ni formas verbales tan llenas de vida como engurruñarse, curucutear, margüir; ni manera de calificar con tanta exactitud un reunión escandalosa sin apelar a nuestras comunes expresiones: foleo, fochera, gorotopo, bullaranga…

Cuando queremos indicar que una persona atraviesa una mala situación decimos que está en la insiforia, a un tipo muy alegre lo llamamos jochao, a un muchacho con cara sucia le decimos curtido, a un amigo o conocido lo llamamos primo, y ñoco le decimos a quien carece de una mano.

¿Y los refranes y expresiones únicos de nuestra tierra?

Los zulianos estamos convencidos de que tenemos una fuerza aterradora para describir, de allí los refranes y expresiones que utilizamos cotidianamente: "Cuando se caiga el puente", expresión que se hizo popular a inicios de los años 60 como una forma de responder o expresar algo que nunca pasaría, pero en 1964 el tanquero Esso Maracaibo chocó contra la estructura y tumbó un tramo del mismo haciendo posible lo que parecía imposible.

"Más salao que lampazo de barco", "Más seco que pañal de muñeca", "Más apurado que machorro en piso pulido", "Más ordinario que un sanitario transparente", casi todos iniciados con el adverbio de cantidad más, en alusión a que todo zuliano es exagerado.

También utilizamos expresiones como "mialma" y "vergación", las cuales conjugamos en todos los tiempos verbales posibles. Por ejemplo; ¡Mialma, no sabía eso!, ¿Estáis preñaa, mialma?; y el "vergación" cuando algo parece sorprendernos, hacemos énfasis siempre en el tamaño, color, olor y otras características de algo con la palabra "vergación", ejemplo; "Vergación de grande es tu casa" o "Vergación de calor hay".

Nuestro dialecto es el más atractivo del mundo, el que más formas ha asimilado y ha mantenido sus raíces, sin que haya sido un obstáculo para extraer, incluso, de otras lenguas, lo mejor para crear connotaciones propias de la creatividad del zuliano.

APOSTADORES MARACUCHOS


Dos apostadores enfermizos están mirando a la vieja del frente que tiene las piernas abiertas y dicen: - La pantaleta de la señora es negra; el otro apostador brinca y dice: - NO! es marrón... Mandan a un carajito a verificar de qué color es la pantaleta y al regresar les dice: - Se pelaron los dos, ni es negra ni es marrón… son moscas.