DANELO BADELL, GRAN SOLISTA GAITERO




1950, nace en Maracaibo, Zulia, Danelo Enrique Badell Galué, compositor, cantante, dirigente gremial y técnico en telecomunicaciones egresado de la Escuela de Comunicaciones de Maracaibo, conocido en el ambiente gaitero como "El Cañón Viejo de la Gaita".

Esta gloria de nuestra gaita fue por varios años presidente del Instituto Municipal de la Gaita Ricardo Aguirre, Imgra, donde hizo magia para saber administrar los pocos recursos con los que contaba. Ha pertenecido a los conjuntos gaiteros: Lagomar, Tropicales del Éxito, Santanita, Gran Coquivacoa, Cardenales del Éxito, Gaiteros de Pillopo, VHG, Estrellas del 2000, Iluminación Gaitera, Universidad de la Gaita, entre otros.

Danelo ha obtenido varios reconocimientos, entre ellos el Premio Virgilio Carruyo 1982 y el Solista Gaitero del Año 1993. Despide el siglo XX con una gaita dedicada a su eterno compadre Astolfo Romero, con la cual obtuvo indiscutiblemente el anhelado galardón de la Gaita del Año con la obra musical Toda una vida, de los compositores Wolfang Romero y Leandro Zuleta, y con el acompañamiento musical de Iluminación Gaitera.

Entre sus grandes clásicos en el género gaitero recordamos: La Negra cocoa-coa, La piñata, Fiesta decembrina, Los remedios, Porque te quiero, Prefiero mi gaita, Fascinante Venezuela, Las cosas buenas, entre tantos éxitos.

En la temporada 2015 grabó con Manatará la primera gaita erótica de la historia, titulada Amor asimétrico, al lado de Danielita Palma; en esta temporada suena con varias gaitas a la vez, lo que lo convierten en el Solista Gaitero 2023. Una de esas producciones es Río de amor, la cual puedes escuchar y descargar en nuestro portal www.elzulianorajao.com en la sección Multimedia - Manatará.

Desde El Zuliano Rajao le deseamos un feliz cumpleaños a este exitoso gaitero, que para el equipo de El Zuliano Rajao es considerado un gran guarachero.


Por: Agustín Arteaga


APOSTADORES MARACUCHOS


Dos apostadores enfermizos están mirando a la vieja del frente que tiene las piernas abiertas y dicen: - La pantaleta de la señora es negra; el otro apostador brinca y dice: - NO! es marrón... Mandan a un carajito a verificar de qué color es la pantaleta y al regresar les dice: - Se pelaron los dos, ni es negra ni es marrón… son moscas.