Diciembre 17, 2021

Lázaro, nombre de origen latín que significa: Dios es mi auxilio.
Este Santo era el jefe de un hogar donde Jesús se sentía verdaderamente amado. A esta casa llegaba el Redentor como si fuera su propia casa, hecho que lo llenaba de satisfacción.
Un día, cuando ya Jesús no estaba en esa casa, Lázaro se enfermó, y dos de sus hermanas enviaron a un mensajero con urgencia al sitio donde se encontraba Jesús. El mensaje era: "Aquel a quien tú amas está enfermo".
Pasaban los días, Lázaro empeoraba y Jesús no llegaba; después del cuarto día llegó, pero ya era demasiado tarde.
Al enterarse de que ya Lázaro había muerto, Jesús lloró desconsoladamente, pero dijo: "Yo soy la resurrección y la vida. Los que creen en mí no morirán para siempre. Lázaro: Yo te mando. Sal fuera".
Fue una de las frases más poderosas de Jesús, pero sirvió para que Lázaro, después de cuatro días de enterrado, recobrara la vida y saliera totalmente del sepulcro.
Por: Agustín Arteaga